jueves, 21 de agosto de 2008

El periodismo es un ordenador de la realidad y generador de conocimiento


El periodismo, inmerso en la esfera de la comunicación, se interpreta como un elemento inherente a la construcción de estructuras sociales de un sistema. Éste se define como “aquella actividad consistente en recabar informaciones, seleccionarlas, procesarlas, recogerlas en un soporte y ofrecerlas - todo ello de modo periódico - “[1]. Este proceso es desarrollado de manera conjunta entre el periodista y sus fuentes de información, generando de esta manera un ejercicio de interacción social. “Por supuesto que un periodista debe tener cualidades propias, pero su tarea va a depender de los otros: aquel que no sabe compartir difícilmente puede dedicarse a esta profesión. El periodismo, se encuentra entre las acciones más gregarias que existen, porque sin los otros no podemos hacer nada”[2].

“El periodismo fue inicialmente un oficio. Hoy es un sector económico de notable peso… El periodista es un profesional de la información y el periodismo un campo de actividad no del todo bien definido, que trabaja en un sector de la actividad absolutamente presente en la vida de todos los ciudadanos”[3]. El periodista está llamado a convertirse en un generador de conocimiento un ordenador de la realidad que construye día a día una agenda informativa la cual le permita establecer “una forma de expresión oral sin la cual el hombre conocería su realidad únicamente a través de versiones orales, resúmenes, interpretaciones, relatos históricos y anecdotarios. Quienes se dedican al ejercicio del periodismo -los periodistas- responden las preguntas esenciales: qué, quién, cómo, cuándo, dónde, e idealmente el porqué del acontecer humano”[4]

“Ingresar en el periodismo es iniciar una andadura a través de una profesión compleja y llena de atractivos, pero también de incertidumbres. Unos y otras, además, no sólo tienen que ver con las exigencias propias de informar, sino muy directamente con los entresijos que constituyen en el mundo de las relaciones intraprofesionales.”[5]

Como profesión se desarrolla y se enmarca en el campo de las ciencias de la comunicación, convirtiéndose en una línea transversal que apoya y sustenta los procesos comunicativos inherentes al hombre y al campo de las investigaciones. El periodismo “es por tanto una actividad abierta que trabaja con la información, entendida ésta en el sentido más amplio posible.”[6] Su tratamiento académico debe ser abordado desde una propuesta formativa científica, que se apoye en los procesos investigativos y se brinde un desarrollo sólido del conocimiento en técnicas periodísticas, contexto cultural y especificidades.

“La dimensión científica del Periodismo, así suscitada, se sitúa no solo en el marco de las Ciencias Sociales, sino también en el marco de la Teoría del Conocimiento, en cuanto conceptuación de un saber especifico, el ya definido como saber periodístico (Beneyto, 1974)”[7].

La responsabilidad social del periodista se presenta de manera permanente en su hacer, lo cual obliga a una construcción teórica que sustente de manera clara la praxis y pueda compaginar sin reñir dentro de la sociedad del conocimiento. “A la pregunta ¿qué pasa por el mundo?, el Periodismo responde con noticias o informaciones, pero no de modo inorgánico, sino con noticias o informaciones sometidas a un sistema de clasificación… La imposibilidad fáctica de responder a la pregunta en todos sus términos, determina una doble característica del Periodismo, doble característica que configura su sistema: el Periodismo actúa por sinécdoque (representando el todo por la parte) y se manifiesta por conjuntos (diferenciando entre acto informativo y acto periodístico)”[8].

“El conocimiento científico que hoy se tiene del Periodismo en el mundo occidental nos permite definirlo como aquella modalidad de la comunicación de masas que tiene como fin especifico la difusión no intencional de hechos y el comentario subjetivo, pero honesto, de los acontecimientos socialmente relevantes”[9]. Lo cual nos lleva a concluir, desde la perspectiva de Martínez Albertos, que se debe estudiar al periodismo en pro de una construcción del concepto científico donde se genere un estado del arte robusto en la investigación que nos permita desarrollar un corpus mismo de la profesión dentro de su definición específica. Teniendo en cuenta los elementos que comprenden el ejercicio dentro del ordenamiento de la realidad y la transformación de la información en conocimiento como lo platea Enrique de Aguinaga. “La clasificación periodística, que aplica criterios subjetivos de importancia, al mismo tiempo que transforma la información en conocimiento, formula, como subrayaba el profesor Hudec, una interpretación de la realidad”[10].

Por lo tanto, la formación del hacer en el periodismo gira en torno al saber hacer con el saber y pensar en el desarrollo de la profesión teniendo en cuenta los diversos contextos sociales, la formación cultural, la responsabilidad social y el papel de historiadores diarios que se ejerce a través de los medios de comunicación o de manera independiente.

Esto convierte al periodista en los sentidos de la sociedad y teniendo en cuenta la proximidad a los hechos surge la necesidad de la conformación de un campo específico para pensar el periodismo y contextualizarlo en los otros escenarios donde se puede desarrollar el periodista. Se solidifica, de esta manera, un propósito científico de aquel que se encarga de manejar la información.

[1] BARRERA, Carlos (coordinador). “Historia del Periodismo Universal”, Editorial Ariel España 2004, p. 24
[2] KAPUSCINSKI, Ryszard, “Los sentidos del periodista”, Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano 2003, p. 16
[3] BARRERA, Op. Cit., p. 23
[4] MARÍN, Carlos. “Manual de Periodismo”, Random House Mondadori, S.A. 2006, p. 10
[5] ORTEGA, Felix y otros, “Algo más que periodistas, Sociología de una profesión”, Editorial Ariel 2000, p. 172
[6] BARRERA, Op. Cit., p. 26
[7] DE AGUINAGA, Enrique, “Hacia una teoría del periodismo”, UCM 2001, p. 3
[8] Ibit., p. 2
[9] MARTÍNEZ ALBERTOS, José Luis, “Metodología para el conocimiento científico de la periodística”, En: Revista Académica 1990, p. 46
[10]DE AGUINAGA, Op. Cit., p. 10